EL movimiento funcional y la arquitectura orgánica, son las fuentes de las que partirá toda la arquitectura posterior, hasta nuestros días. La característica que distingue la más moderna arquitectura es la de intentar coordinar las dos grandes tendencias anteriores, tomando por un lado, las estructuras racionales del funcionalismo y, por otro, el cálido sentido humano de la arquitectura orgánica.
El resultado será un arquitectura que, sin salirse de los postulados de la lógica funcional, atenderá a las necesidades de confort individual que requiera cada caso y circunstancia.
Otras cuestiones importantes cuyas consecuencias inciden y repercuten en las formas arquitectónicas actuales son:
1º Los progresos técnicos de la construcción, especialmente en lo que se refiere al hormigón armado, hormigón pretensado y al empleo de nuevos materiales resistentes y ligeros, como el aluminio, que ponen a su disposición del arquitecto unos medios de construcción que le permiten la obtención de formas estructurales nuevas.
2º El progreso tecnológico en general, que ha permitido nuevas formas en el uso de materiales de construcción tradicionales como la cerámica, el vidrio y la madera.
3º El empleo en gran escala del cálculo de ingeniería en el cálculo de las estructuras, que ha llevado a grandes obras.
4º La evolución social, económica y política del mundo, que ha motivado una mayor preocupación por los problemas urbanísticos y de estructuración del hábitat humano.
La influencia de estos factores en la arquitectura actual se traducen en unas características estilísticas, que aun no estando bien definidas dada la complejidad de su variada gama, nos permiten iniciar un camino en la definición de un estilo. Tales son:
a) Las estructuras metálicas o de hormigón armado que permiten la cubrición de grandes espacios con un mínimo de puntos de apoyo empleando para grandes luces, arcos o bóvedas parabólicas, elípticas o hiperbólicas.
Las curvas geométricas de mayor complejidad matemática aparecen también en algunas construcciones actuales.
b) El muro pierde casi totalmente su importancia como elemento de sustentación y el cierre de los espacios se realiza por grandes superficies acristaladas o por materiales adecuados a la función de aislamiento.
c) Las formas arquitectónicas se adaptan a su función social y económica, y los edificios se articulan en conjuntos que tienen en cuenta los factores urbanísticos.
d) Los factores geográficos y humanos influyen los detalles estilísticos y caracterizan las distintas escuelas regionalistas.
Alvar Aalto. Sanatorio de Paimio 1929. Fuente: historia de los estilos
Autores y asesores.
D. Fernando Álvarez Vidorreta
D. Joaquín Cadena Portal
D. Juan de Cusa Ramos
D. José M. Mayoral Sanfelíu
D. Alejandro Ribó Boadella
D. Federico Ulsamer Puiggarí
D. José Luís Velasco Antonino
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